La tarde noche de ayer martes se vivió una gran fiesta de fútbol teñida de Vinotinto con la gran victoria de Venezuela ante la selección Chilena con marcador de 3 goles por 0 en el imponente estadio "Monumental" de la calurosa ciudad de Maturin ante más de 52 mil almas que auparon a más no poder cada uno de los goles de nuestra selección.
Y es que Venezuela hizo la tarea encomendada y vaya de que manera, venciendo a uno de los rivales directos en su carrera a lograr un cupo al mundial de fútbol 2026. Y no fué que se ganó con algo de suerte o de manera inesperada, pues no, se ganó como ganan los grandes equipos, pasándole por encima al rival, asfixiandolo y aprovechando los errores y ventajas concedidas por el adversario (cosa que antes nos costaba un mundo materializar) de ayer que a ciencia cierta compitió de tu a tú los primeros 20-25 minutos del partido en los que llegó a imponer su fútbol, con situaciones claras de gol (hasta un balón estrellaron en el travesaño) que de haberlas convertido ponían en claros aprietos a la selección criolla.
Pero a pesar de las escaramuzas chilenas en los primeros minutos del encuentro siempre los nuestros mantuvieron la calma y el orden necesario para salir ilesos de los ataques de la selección roja (que ayer vistió de blanco). Y fué con un cabezazo de Salomón Rondón que providencialmente sacó el arquero chileno robándole el grito de gol al delantero estrella y así se comenzó a avivar el juego de los nuestros y al mismo tiempo el despertar de la tribuna que se mantenía silenciada en las primeras de cambio.
De allí en adelante comenzó el dominio total de La Vinotinto y de la noche mágica del pequeño gigante Yeferson Soteldo quien sacó toda su magia y firmó su mejor partido con la selección nacional y con pase del "Brujo" Martínez y en las postrimerías del primer periodo logró definir de buena manera cruzando el balón al palo contrario del arquero y conseguír el 1-0 que hacía explotar de emoción a todo el estadio.
Ya en la segunda etapa ocurrió un hecho por parte de la selección Chilena que terminó de condicionar el partido y fué la expulsión del jovencito Marcelino Nuñez que apenas tenía pocos minutos en cancha y de manera infantil instigó con su dedo índice al árbitro principal a la altura del pecho luego de que este lo había amonestado con una tarjeta amarilla por una fuerte entrada sobre Cristian Casseres, acción ésta que se convirtió en otra tarjeta amarilla y de inmediato en expulsión con cartulina roja.
A partir de allí Venezuela aprovechó la superioridad en cancha y los espacios dejados por la defensa austral y al minuto 65 se vino el segundo episodio del show de Soteldo cuando a base de velocidad se llevó la marca y llegando hasta el fondo del área chilena, logró burlar a un defensa y al mismo arquero y casi sobre la línea final ponerle la esférica al goleador Salomón Rondón quien con exquisito toque la mandó a guardar y así facturar un bonito gol en su partido número 100 con la camisa de la selección.
En menos de 10 minutos vino la estocada final, teniendo como protagonista nuevamente al héroe de la noche "Soteldinho" como lo llaman en Brasil, quien nuevamente a base de velocidad, potencia y florituras superó las marcas y con centro a media altura desde el sector izquierdo que fué levemente cabeceado por Cristian Casseres y finalmente conectada por el extremo Darwin Machis haciendo que las 52 mil almas gritaran al unisono "TOOOOMAAAA PAAAAAPAAA", gol Vinotinto que nos dejaba en ese momento en el tercer lugar de la tabla de posiciones.
Posteriormente la selección Charrúa se impuso a Brasil con marcador de 2-0 dejando a la Vinotinto en el cuarto lugar empatada con siete unidades al igual que Brasileños y Uruguayos. Esta doble jornada fué fructífera para Venezuela ya que logró amasar 4 puntos de 6 disponibles y en total son 7 los puntos alcanzados hasta ahora con un diferencial de goles de (+3), ésta posición en la compleja eliminatoria sudamericana no se veía desde la época de César Farías al frente de la selección nacional y como lo dije en el encabezado ya el sueño Vinotinto está tomando forma y con éste triunfo de local ante Chile se les envío un claro mensaje al resto de los seleccionados de que Venezuela es un duro rival y que no pueden dar por descontado las victorias cuando se enfrenten a la selección que magistralmente dirige el argentino Fernando "El Bocha" Batista.
Y es que el DT argentino quien a muchos (y me incluyo) le inspiraba más dudas que certezas al momento de hacerse cargo de la selección ha sabido llegar con su mensaje y su propuesta futbolística a TODOS y cada uno de los jugadores, quienes cuando saltan al campo bien sea de titulares o como recambio dejan todo en la cancha por el bien colectivo de nuestra selección.
El próximo 12 de Noviembre del 2023 se nos viene la última doble fecha de las eliminatorias por éste año en la cual nos tocará recibir a la dura Ecuador y luego viajar a Perú a vernos las caras ante el combinado Inca quienes andan en horas bajas con un solo punto, sin victorias y tres derrotas lo cual a pesar de ir como visitante debe ser aprovechado por el seleccionado criollo y continuar en la ruta que nos lleve al próximo mundial y que toda Venezuela siga diciendo, "MANO TENGO FE"...Hasta la Próxima
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